Qué lejos te cae, niña, lo que por acá vivimos. Qué lejos te cae lo que por acá nos preocupa. Este no es tu mundo. Esta no es tu ventana. Tu mundo es otro. Más natural, más humano y, por eso, más olvidado, más lejano. Tú no eres la niña de Rajoy. La tuya no es la paz de Zapatero. Tú eres del río, de la selva. Tu paz es la de los tuyos, la de la supervivencia. Hoy dicen que es tu día, porque tú eres mujer y tú trabajas. Trabajas tu ilusión y tu esperanza de todos los días. Y acá, de reflexión, como si eso nos acercara a tu realidad, la de los tuyos, la de la selva. No, quizás nos acerque más a nuestro ombligo, a nuestros problemas. Hoy, en este día, abro esta ventanita, pero no te asomes, que no es la tuya, sino la nuestra, para asomarnos a tu vida, esa sí que es tuya y no nuestra.
1 comentario:
Quisiera volver a ser una niña, como tú, inocente, con un egoísmo sencillo, como los propios de las niñas de tu edad, aunque seguro que a ti eso tampoco te está permitido por la sencillez de tu ambiente, de tu entorno. Me ustaría vivir sin grandes complicaciones abstractas como son, para ti, los problemas del mundo occidental. Me gustaría vivir en un mundo sin política corrupta o mentirosa que sólo lucha por el poder sobre los ciudadanos y no para que mejore la situación en el Pueblo. Me gustaría vivir en un mundo, en el que se ame la vida, el amor, la fraternidad, la unidad, el compañerismo, la paz, la felicidad. Me gustaría vivir sin muerte, sin terrorismo, sin egoísmo, sin esos rancios pecados con los que vivimos por aquí. Yo votaré, pero te digo, niña inocente, que cuando crezcas, todo será más duro. Intenta luchar para que no te cambien tu inocencia y sencillez de alma, lucha por la Fraternidad Universal.
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